La transformación digital contribuye a las operaciones sostenibles en todo el ecosistema empresarial, sobre todo para los minoristas, quienes se apoyan en la conectividad, visibilidad, agilidad y optimización para lograr la sostenibilidad.
Jordan Speer, gerente de Investigación y Cadena de Suministro Global en la IDC, ha dicho que esto incluye la planificación y el diseño de productos, desarrollo y producción, gestión de instalaciones y activos.
La digitalización, habilitada y mejorada por la nube, IA (Inteligencia Artificial), visión por computadora, IoT / RFID (Internet de las Cosas / Identificación por radiofrecuencia), AR/VR (Realidad Aumentada / Virtual) y computación perimetral, aportaría a las operaciones minoristas de principio a fin (transporte, cadena de frío, devoluciones y logística inversa).
“También proporciona un medio para ver, medir, registrar, comparar e informar los esfuerzos ambientales y sociales, preparando el escenario para que las empresas comprendan lo que están haciendo de manera más holística y mejorarlo”.
Speer considera que el metaverso es una extensión de la vida mejorada por la tecnología, que actualmente existe como una serie de mundos virtuales.
En el futuro, cree que el metaverso será un mundo interminable e interconectado donde las vidas digitales y físicas convergerán completamente.
“Imagínese esperar una cita en un stand real en el piso de exhibición de NRF mientras su avatar recorre un NRF digital completamente desarrollado, conoce a otros asistentes (que pueden o no estar allí en persona), se detiene para tomar un café en el Starbucks digital y pagando un café que un empleado presencial de Starbucks trae del entrepiso del Javits Center”.
Entonces, los “yoes” digital y físico se fusionarían a la perfección en el metaverso, a medida que los mundos se acercan. Para el comercio minorista, el metaverso sería un espacio para que las marcas también tengan presencia digital, ya que existirían posesiones virtuales y consumidores.
El metaverso, fuera de su función como canal de ventas, igualmente abriría posibilidades para recopilar datos sobre los consumidores y la demanda de productos; “podría ser un vehículo para operaciones más sostenibles”.
Las experiencias híbridas
La gerente de Investigación en la consultora ha enfatizado que las experiencias híbridas están de moda y que el metaverso abre un mundo de oportunidades de venta para los minoristas, al tiempo que cerraría la brecha entre los mundos digital y físico.
“Si bien es posible que la mayoría de los consumidores no estén equipando un avatar en el universo, se están moviendo entre en línea y fuera de línea a su antojo y esperan que los minoristas se adapten a esos viajes omnicanal híbridos sin problemas”.
Estas demandas se habrían acelerado en la última milla e incluirían experiencias como comprar en línea y recoger en la tienda o en la acera, o comprar en la tienda y devolver la mercancía en línea.
Las experiencias híbridas, entonces, abrirían oportunidades para complacer al consumidor de nuevas maneras, pero también agregan gastos y complejidad, incluyendo la necesidad de una conectividad mejorada para permitir experiencias seguras.
“Las aplicaciones de administración de tareas ayudan a mejorar y optimizar la participación de los empleados en la tienda, mientras que las aplicaciones sin contacto permiten pagos más rápidos y el autoservicio de pago del cliente”.
La RFID también permitiría mejorar la precisión y ubicación del inventario, en el estante, en toda la tienda y en la cadena de suministro. “En general, los minoristas buscan plataformas unificadas que interoperen a través de omnicanal”.
Igualmente, se inclinarían por microservicios que les permitan intercambiar módulos fácilmente, visibilidad de los datos en toda la empresa, o el ecosistema, y tener la capacidad de integrar sistemas rápidamente.
Todo esto, con aplicaciones funcionando bien, juntas, independientemente del proveedor de nube, protección de seguridad, fraude en todos los datos y todos los sistemas e infraestructura.
